El papa Francisco, de 88 años, enfrenta un cuadro de neumonía bilateral, según informó este lunes el Vaticano. Su estado de salud ha sido calificado como “complejo”, lo que ha requerido un ajuste en su tratamiento médico. La noticia se produce después de varios días en los que se habían reportado problemas respiratorios que afectaron la agenda del Pontífice.
De acuerdo con el comunicado oficial del Vaticano, el papa Francisco ha recibido tratamiento antibiótico y antiinflamatorio para combatir la infección pulmonar. Aunque en los últimos días se había mostrado estable, los exámenes médicos revelaron una afectación en ambos pulmones, lo que llevó a los médicos a reforzar la terapia.
El Pontífice, que ya había reducido su actividad pública debido a su estado de salud, ha sido sometido a monitoreo constante por su equipo médico en el Policlínico Gemelli de Roma, donde ha sido tratado en ocasiones anteriores por diversas dolencias. Fuentes cercanas al Vaticano indicaron que, aunque sufre episodios de fatiga, se mantiene consciente y de buen ánimo.
Suspensión de actividades y preocupaciones
El Vaticano ha confirmado que el papa Francisco no participará en la audiencia general de los miércoles ni en la celebración del Jubileo de los Diáconos prevista para este domingo. En su lugar, el cardenal Rino Fisichella, responsable del dicasterio para la Evangelización, presidirá los actos religiosos programados.

Esta no es la primera vez que la salud del Papa genera preocupación. En los últimos años, ha enfrentado problemas médicos recurrentes, como cirugías abdominales y dificultades de movilidad debido al dolor crónico en una de sus rodillas. A pesar de estos desafíos, el líder de la Iglesia católica ha insistido en continuar con sus funciones mientras su estado lo permita.
La noticia ha generado preocupación en la comunidad católica y entre líderes religiosos de diversas partes del mundo. Numerosos fieles han expresado su apoyo al Pontífice a través de mensajes en redes sociales y cadenas de oración organizadas en distintas diócesis.
Desde su elección en 2013, Francisco ha mantenido un papado marcado por reformas y un enfoque en la cercanía con los sectores más vulnerables de la sociedad. Su salud ha sido un tema de atención en los últimos años, y él mismo ha mencionado en diversas ocasiones la posibilidad de renunciar si sus condiciones físicas le impiden seguir con sus responsabilidades.
Por el momento, el Vaticano no ha dado detalles sobre la duración esperada del tratamiento ni sobre la evolución a largo plazo del estado de salud del Papa. Se espera un nuevo informe médico en los próximos días. EFE